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El “Mensajero al Poblador Rural” es un espacio radial que se emite por frecuencias AM de la Patagonia como LU 20, LU17, LRA 30, LU 4, LRA9, Radio Nacional Esquel y otras, seis veces al día desde hace más de setenta años. Constituye el más importante (y en muchos casos el único) nexo comunicacional de los habitantes de la zona rural patagónica con las ciudades y entre sí. En muchos casos es uno de los soportes imprescindibles de quienes habitan este extenso territorio. Se trata de verdaderas “cartas radiales”.
La pérdida y el hallazgo de animales, la solidaridad, el motivo del viaje, la distancia de un pueblo a otro, las inclemencias climáticas, las sombras del atardecer y los vínculos familiares y sociales que se tejen en la inmaterialidad de un mensaje de radio reflejan la textura de la inmensidad patagónica y de quienes la habitan.
Los que nacimos y crecimos allí sabemos de qué se trata. Sea quien fuere el oyente, es difícil no prestar atención a la voz del locutor cuando anuncia esos micro-relatos tan llenos de ruralidad y, al mismo tiempo, desde el oído urbano, tan llenos de poesía.
Se trata de relatos fragmentados que se entretejen develando un mundo visible – audible detrás de ese vacío silencioso que se prefigura como desierto, sin un camino establecido para recorrerlos y ni siquiera un principio o fin.
Las fotos de Jorge Piccini recogen esta circunstancia y plantean un entramado poético a partir de estas voces. Los vínculos que establece entre mensajes e imágenes ponen de manifiesto una ausencia: algo que no encuentra palabra para ser nombrado pero que se percibe. Las imágenes, plenas de texturas, emanan una profundidad infinita. Sensaciones, olores, un tiempo y una manera de estar, un ritmo. El oído se afina y la piel se abre para recibir el viento que trasporta la trama. Las yemas de los dedos se trasforman en tierra.
Los límites entre fondo y forma se desdibujan: las imágenes son lo que parecen y más y otra cosa. Hablan del instante y del estar, develando la belleza de lo pequeño y cotidiano de estas vidas, incluso en el silencio. Quizá, también, poniendo en evidencia lo difícil que nos resulta acercarnos a esa belleza. En eso radica la virtud de su obra.
* Prólogo del libro «Mensajes al poblador rural» del fotógrafo Jorge Piccini escrito por Ana Laura Suárez Cassino.